Ciudad capital

Hasta menos de un año atrás, no conocía ninguna de las capitales europeas. Ahora conozco cinco. Comentaré mis humildes impresiones como simple y reciente viajante de estas tierras occidentales. La Torre Eiffel. París. La primera ciudad que conocí fue París. Debo confesar que fue un sueño hecho realidad. Siempre quise ir a París, a la que conocía a través de la literatura, las películas, la fama de ciudad bohemia que dejó tras de sí el haber albergado a generaciones de escritores latinoamericanos, entre ellos, a nuestro querido poeta César Vallejo que murió ahí, un tristísimo día de lluvia. Si bien es una ciudad hermosa, escultórica, mágica, tres cosas me llamaron la atención. Lo primero fue la cantidad de fumadores. Me había desacostumbrado del humo del cigarrillo dado que en Estados Unidos ya prácticamente nadie fuma, lo mismo en mi ciudad capital: Lima. Lo segundo fue la constatación de que el café no es un lugar de encuentro, es más que nada un lugar de observación, para ver...